Prepara todos los ingredientes, deshuesa los dátiles y precalienta el horno a 180ºC.
Pon los dátiles en agua hirviendo, apaga el agua y déjalos en remojo unos 10-20 minutos. Cuando estén blanditos, trituramos en un robot de cocina con un chorrito del agua que ha quedado en el cazo. Debe quedar una pasta.
Tritura el chocolate con los frutos secos para que queden en trocitos pequeños.
Bate los huevos.
Mezcla todos los ingredientes y vierte la mezcla en un recipiente de cristal o silicona, untado con un poco de aceite para que no se pegue.
Introdúcelo en el horno 40 minutos a 180°